Descubre cuáles son los problemas cutáneos más comunes en los perros

 

Los problemas cutáneos son muy frecuentes en los perros. Por fortuna, la piel es también el órgano más visible del organismo, de modo que es posible reaccionar muy pronto cuando se descubre alguna anomalía

Marina G Veterinaria

 

Los problemas de la piel son muy comunes en los perros, y pueden ir desde algo tan simple como el picor provocado por las pulgas hasta infecciones recurrentes debidas a una enfermedad subyacente, ya sea cutánea o sistémica.
Esto significa que el aspecto de la piel y el pelo de tu perro puede ofrecer mucha información valiosa, no solo sobre el estado de la piel en sí, sino también sobre la salud general de tu mascota.

 

¿Cómo puedes saber si tu perro sufre un problema cutáneo?

Los problemas de piel en el perro pueden ponerse de manifiesto mediante diferentes síntomas y lesiones, entre los que se incluyen:
•    Picor (prurito) y rascado
•    Pérdida de pelo (alopecia)
•    Irritación y enrojecimiento (inflamación)
•    Piel oscurecida y engrosada
•    Llagas, heridas y úlceras
•    Costras
•    Protuberancias minúsculas (pápulas y pústulas)
•    Piel seca y escamosa con caspa, o piel grasienta y maloliente
•    Bultos y protuberancias (nódulos)

 

Los perros con problemas cutáneos pueden mostrar uno o, lo que es más habitual, varios tipos de estas lesiones. 
Dado que la piel es el órgano más grande del perro y es muy visible (a diferencia de los órganos internos, como el hígado y los riñones), estas lesiones suelen ser fáciles de detectar.

Sin embargo, en los perros de pelo largo pueden quedar ocultas y, como el picor, por ejemplo, puede no presentarse de forma continua, no siempre es posible advertirlas.

Además, es importante tener en cuenta que las orejas también forman parte de la piel de tu perro, por lo que muchos problemas que afectan a la piel también afectarán a las orejas.

Existen diversas causas que pueden generar problemas cutáneos, desde afecciones que se limitan a la piel hasta enfermedades sistémicas que repercuten en la salud general del perro.

 

¿Pueden los parásitos provocar problemas cutáneos?

Los parásitos externos no solo son extremadamente molestos, sino que también pueden causar toda una serie de problemas de salud a tu perro, como infestación por parásitos internos, enfermedades infecciosas complicadas, infestaciones en el hogar y… lo has adivinado, problemas en la piel. Los parásitos más comunes son:

Pulgas

Las pulgas son, con diferencia, los parásitos externos que afectan a los perros con más frecuencia. Están presentes en muchos entornos y, si bien su actividad es más marcada en primavera y verano, pueden ser un problema en cualquier momento del año.

Si tu perro tiene pulgas, seguramente lo primero que notes es que tiene mucho picor. Si pasas los dedos por el pelo del perro, es posible que veas pulgas moviéndose o bien deposiciones de las pulgas, que parecen motas de polvo negras.

Las lesiones de la piel suelen ser el resultado del rascado, e incluyen irritación y enrojecimiento de la piel, heridas, costras y zonas con pérdida de pelo. Los perros que son alérgicos a la picadura de la pulga presentan afecciones más graves y a menudo desarrollan infecciones secundarias.

 

Flea feaces in dog's coat

Ácaros

Son varias las especies de ácaros que pueden afectar a los perros, pero las más comunes son Sarcoptes scabiei, responsable de la sarna sarcóptica canina, y Demodex canis, responsable de la demodicosis. Las infecciones por ácaros son más frecuentes en los perros jóvenes.

Sarna sarcóptica

La sarna sarcóptica es una enfermedad cutánea muy contagiosa que puede transmitirse tanto a los humanos como a otras mascotas, y los perros suelen contagiarse por contacto con otros perros infectados.

Como estos ácaros excavan trayectos bajo la piel, se trata de una enfermedad que provoca mucho picor. Los perros suelen presentar múltiples lesiones en la piel, más frecuentemente localizadas en la parte ventral, codos, pies, cara y orejas, que consisten en zonas sin pelo y piel enrojecida, engrosada, costrosa e incluso a veces ulcerosa.

La intensidad del picor aumenta de manera progresiva y el cuadro de lesiones empeora con el tiempo si no se trata. Puede producirse además una infección secundaria por bacterias o Malassezias.

Demodicosis o sarna demodécica

Los ácaros del género Demodex se encuentran en los folículos pilosos del perro de forma natural. En algunos perros, se produce un sobrecrecimiento de estos parásitos que conduce al desarrollo de un problema cutáneo local o generalizado. 

No se sabe todavía a ciencia cierta por qué algunos perros desarrollan una enfermedad cutánea por la presencia de ácaros Demodex y otros no. No obstante, parece existir una predisposición genética a la demodicosis, y los perros más frecuentemente afectados son, por ejemplo, los de raza Sshar pei, West Highland white terrier y bulldog inglés.  También parecen favorecer el desarrollo de esta enfermedad los problemas que debilitan el sistema inmunitario.

La demodicosis puede ser localizada, en cuyo caso afecta a una zona limitada del cuerpo —normalmente, la cara y las patas—, donde aparecen pequeñas áreas alopécicas, enrojecidas y escamosas, o bien generalizada (ver la imagen). La enfermedad generalizada suele ser grave y puede complicarse con infecciones secundarias por bacterias o Malassezias. Los perros con demodicosis pueden presentar picor, pero su intensidad es variable.

Infecciones cutáneas: problemas secundarios frecuentes

La piel sana aloja un número enorme de microorganismos, entre los que se encuentran bacterias y levaduras que normalmente tienen una función protectora de la piel contra las agresiones externas. No obstante, cuando la piel está dañada, se altera su delicado equilibrio y esto puede provocar un crecimiento excesivo de esta población microbiana (o de otros microorganismos), lo que a su vez conduce a la aparición de infecciones.

Esto implica que cualquier enfermedad que afecte la piel o provoque picor puede favorecer el desarrollo de una infección cutánea secundaria.

La piel infectada parece inflamada, engrosada, húmeda o con costras, y suele causar picor intenso. Puede desprender, además, un olor desagradable. Es probable que los perros afectados se laman, restrieguen o rasquen las zonas infectadas, en un intento de encontrar algo de alivio, pero causando con ello más lesiones en la piel. Cuando son recurrentes o de larga duración, los problemas y las infecciones cutáneas tienden a alterar el color y la textura de la piel, que se vuelve más oscura y engrosada (liquenificación).

Las infecciones cutáneas pueden empezar como una dermatitis húmeda («hotspot»), un problema muy común en los perros, especialmente en primavera y verano, que consiste en un área localizada de piel inflamada que, a menudo, se infecta. La gravedad del cuadro varía según el tipo de trastorno que cause originariamente el problema, así como de la intensidad del picor del perro y las autolesiones que se provoque. 

 

Infecciones bacterianas

La infección cutánea bacteriana, también denominada pioderma, suele estar causada por Staphylococcus spp. Las lesiones iniciales pueden incluir pápulas y pústulas, que tienen el aspecto de pequeños granos que, a veces, están llenos de pus y forman costras.

Infecciones por levaduras

Las infecciones por levaduras, o dermatitis por Malassezia, están causadas por Malassezia pachydermatis y tienden a producirse en los pliegues de la piel, entre los dedos y en el canal auditivo (otitis), si bien pueden aparecer en cualquier parte del organismo. A menudo desprenden un olor muy particular y suelen ser recurrentes.

Tiña

La tiña es una infección contagiosa que los perros pueden contraer cuando entran en contacto con animales infectados u objetos contaminados con el microorganismo que la causa. 

Este tipo de infección suele causar lesiones claramente distinguibles, consistentes en zonas alopécicas de forma circular que a menudo presentan un contorno inflamado y enrojecido, lo que les da un aspecto de anillo. Sin embargo, al contrario de lo que su nombre puede hacer pensar, la tiña no es una enfermedad parasitaria, sino que está causada por un hongo (dermatofito). 

En algunos perros, la tiña también puede provocar picor (prurito), que se agrava si el cuadro se complica con una infección bacteriana secundaria.

¿Las alergias afectan a la piel?

Sí, los perros pueden presentar alergias, ¡igual que las personas! Los síntomas más habituales de las alergias en los perros son el picor y las lesiones cutáneas secundarias, como inflamación, heridas, costras, pérdida del pelo e infección.

Las lesiones suelen presentarse en la parte ventral del animal, las ingles, las axilas, la cara, la parte más distal de las patas y entre los dedos. No obstante, la distribución de las lesiones puede ser muy variable de un perro a otro. Las orejas también suelen estar afectadas en los perros alérgicos, que tienen tendencia a presentar otitis (infecciones del oído) recurrentes.

Las alergias consisten en una reacción exacerbada del sistema inmunitario del perro a una sustancia (alérgeno) que de por sí es inofensiva. Como resultado, se desencadena una respuesta inflamatoria muy intensa, que es la responsable de los síntomas que observamos.

En general, las alergias se clasifican en tres grupos principales, según los alérgenos implicados:
•    Dermatitis por alergia a las pulgas: cuando los alérgenos implicados son proteínas presentes en la saliva de las pulgas.
•    Alergias alimentarias: cuando los alérgenos implicados son componentes de la comida del perro.
•    Dermatitis atópica: cuando los alérgenos implicados son partículas presentes en el ambiente y l entorno del perro, como pólenes o ácaros del polvo.
Sin embargo, resulta complicado distinguir entre los tres tipos de alergias, porque todos se manifiestan de modo similar y porque los perros alérgicos pueden presentar  más de un tipo a la vez .
Existen algunas razas con predisposición a desarrollar enfermedades alérgicas; por ejemplo, West Highland white terrier, labrador, golden retriever, pastor alemán, bulldog francés y carlino.

 

Seborrea: fácilmente identificable

La seborrea canina es un trastorno cutáneo causado por un desequilibrio en la renovación celular de la piel durante su ciclo normal de tres semanas. La seborrea oleosa se caracteriza a menudo por el aspecto grasiento de la piel y del pelo, así como muchas veces por el mal olor que causa el aumento de la producción de sebo. En la seborrea seca suele observarse descamación o «caspa», ya que la falta de sebo provoca la irritación de la piel. Es bastante habitual que los perros presenten una combinación de ambas formas de seborrea. En la mayor parte de los casos, la seborrea es el resultado de un problema subyacente, como una alergia o una enfermedad endocrina, si bien también puede ser primaria, en cuyo caso afecta a los perros jóvenes de determinadas razas (como el golden retriever en el caso de la ictiosis, por ejemplo). 

 

Problemas cutáneos: más allá de la piel

Los problemas cutáneos pueden ir mucho más allá de lo que se ve a simple vista. Existen enfermedades sistémicas que provocan lesiones cutáneas, por eso los tutores  de perros deben ser doblemente cuidadosos cuando su animal presenta problemas de piel.

Por ejemplo, enfermedades hormonales como el hipotiroidismo o el síndrome de Cushing, que son frecuentes en perros de edad avanzada, o bien los trastornos de las hormonas sexuales, a menudo dan lugar a la formación de zonas alopécicas simétricas. 

Las enfermedades autoinmunes, si bien son bastante infrecuentes, también cursan con lesiones cutáneas que a menudo afectan la zona de la nariz, pero también otras partes del cuerpo. Las lesiones son muy variables, pero suelen ser también de distribución simétrica.

 

Prevención de los problemas cutáneos

Hay formas de prevenir ciertos problemas cutáneos; por ejemplo, manteniendo al día los tratamientos antiparasitarios, aseando e inspeccionando la piel del animal con regularidad, y manteniéndola limpia e hidratada mediante el baño. Este último deberá practicarse con la frecuencia necesaria y siempre con un champú adecuado para mascotas.  La gama DOUXO® S3 ofrece una variedad completa de productos innovadores a base de Ophytrium, que contribuye al cuidado de la salud cutánea de tu perro, sea cual sea su tipo de piel. 

Observar con frecuencia la piel y el pelo de tu perro puede proporcionar información muy valiosa sobre su salud general. Si detectas que tu perro presenta algún síntoma de problemas cutáneos, te recomendamos que pidas cita a tu veterinario para una revisión completa.

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claves

 de los problemas cutáneos más comunes en perros